Nahir Galarza, condenada a perpetua en 2018 por el crimen de 2017, sigue enfrentando batallas judiciales.
Una de ellas es contra el psicólogo Gabriel Cartañá, a quien acusa de violación del secreto profesional y falsificación de su firma para revelar su diagnóstico en medios de comunicación. Cartañá asegura que actuó a pedido de Galarza y que no hubo violación del secreto profesional en el ámbito penal. Alega que los abogados de Galarza intentaron inducir su informe para que incluyera que ella era víctima de violencia de género, algo que él se negó a hacer.
La demanda fue presentada en 2022 en Paraná, y tras varios intentos fallidos de notificación, Cartañá fue oficialmente demandado en Ramos Mejía. La defensa de Galarza busca revertir la condena a perpetua, llevando el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, argumentando falta de perspectiva de género en la justicia de Entre Ríos.
